lunes, 12 de enero de 2015

CUANDO EL ÁNIMO CAE...

Hola a todos y todas. Hace tiempo no venía por aquí, y me disculpo por ello. Mi humanidad no es pretexto para el abandono. Por eso, quiero comentarles qué pasó. El título me ayuda.

Sí, me desanimé, me desanimé ante muchas cosas. Me desanimé como profesional, como profesora, inclusive como ser humano. ¿Por qué? Porque empecé a describir lo que veía, haciendo el ejercicio de no usar adjetivos, a fin de darle la mayor objetividad posible. Y el resultado me entristeció, me entristeció tanto que guardé mis notas, cerré mis libros, guardé mis pinceles, e incluso mi maravilloso Proyecto Lolita se vio afectado.

Por fortuna, algo dentro de mí dijo: "escucha a las tres personas que más quieres". Así que me reuní con ellas, simplemente para pasar un muy buen momento - no les mencioné lo que sentía, no quería que se parcializara el mensaje - y debo decir que estas tres personas, que son mi mamá, mi esposo, y mi sobrina de dos años, dijeron lo siguiente (en este orden):

- Aunque haya cansancio, quiero seguir haciendo lo que estoy haciendo
- Lo que realmente llena la vida, no necesariamente la hace más fácil
- ¡Tía, vamos a leer! (en su idioma)

Esto me dijo suficiente para que resolviera, simple y llanamente, seguir haciendo lo que estoy haciendo, y ser feliz con ello. Así que este año 2015, es el inicio de mi era.

Gracias por seguir acompañándome. Espero compartamos mucho en este año nuevo.